Ladrones gilipollas

Ahí van dos casos de ladrones gilipollas.

Caso número 1
Un ladrón quiere robar una tienda por la noche aprovechando que no hay nadie. Hace un agujero en el techo y cae al interior del local dándose un porrazo. Después el muy gilipollas no es capaz de salir y opta por esperar a que vengan a detenerlo.

Caso número 2
Un ladrón roba en una casa una televisión, se olvida del mando a distancia y vuelve al día siguiente a por él. Al muy gilipollas lo cogen entonces.

No hay comentarios: